En cambio, la Argentina mostró una brecha de 15 puntos porcentuales entre la caída de 15 % de la inversión y el crecimiento cero del segundo trimestre. Esta inconsistencia deberá comenzar a corregirse a partir de este tercer trimestre, con datos que se conocerán en plena primavera. En julio y agosto, la importación de bienes de capital (indicador clave de la inversión) moderó la caída a 8 % interanual, pero este guarismo no es todavía congruente con un PIB en expansión. Para cerrar la brecha de indicadores, quizá se requiera acortar la distancia de política económica entre uno y otro país.
Descarga de documentación El acertijo de primavera |