Esa tendencia decreciente tuvo su explicación en las retenciones. Aun con precios internacionales altos, las empresas petroleras en Mendoza cobraban menos, porque el resto se lo quedaba el Estado Nacional al cobrar aquel impuesto. A fines de 2014 se invirtió la situación de los precios, en el cual el pagado internamente pasó a ser mayor que el internacional. De esta manera, la política de precios oficiales pasó a favorecer a las empresas que operaban localmente (luego de una década). Aun así, la mayor extracción en Mendoza se explicó sólo por la empresa estatal. Y se realizó en el Sur mendocino, donde los yacimientos tienen mejores rendimientos. En Mendoza, ese impulso de la petrolera estatal comenzó a notarse desde el inicio de 2015, pero se estancó a fines de 2016. Le ha jugado en contra la reducción en inversiones por parte de la petrolera estatal, y la reducción del subsidio (vía precios) al sector petrolero en el país. Para 2017, el contexto no sería favorable para el sector. A nivel internacional no se espera un boom en el precio del petróleo. Dentro del país, se espera que los precios internos se acoplen a los internacionales, es decir, que serían más bajos, lo cual no alentaría la extracción petrolera. Sin embargo, sorprende que entre las inversiones más esperadas en el país serían petroleras. Un punto clave es el subsidio que percibirían, pero por extraer gas. El gobierno les pagaría el triple del precio internacional. Las inversiones apuntarían a zonas más gasíferas como Neuquén. Mendoza no estaría entre las zonas beneficiadas. |