Luego de poco más de un año de un nuevo gobierno, el balance 2016 muestra claramente ciertas áreas en las que ha tenido aciertos muy claros y otras en las que todavía existen muchos desafíos por delante.
Entre los aciertos podemos nombrar la salida del cepo cambiario (o la eliminación a los controles cambiarios), la finalización de la larga disputa judicial con los fondos en hold out (a los que se denominó fondos buitres), la eliminación de gran parte de las retenciones a las exportaciones, una política monetaria que generó una clara tendencia decreciente de la inflación (aunque aún se encuentre en niveles de crecimiento interanual elevados) y el blanqueo que permitió que hasta el momento activos por 90.000 millones de dólares sean declarados e incorporados a la economía formal (y, por lo tanto, a partir del año que viene comiencen a pagar impuestos).